Resistencia escandinava

En su debut mundialista de este sábado, Argentina empató 1 a 1 con Islandia, en el Estadio Spartak de Moscú. El único tanto para la Selección nacional lo marcó el Kun Agüero, mientras que Alfred Finnbogason empató para el conjunto escandinavo. Para colmo, el arquero Halldórsson le detuvo un penal a Messi, que podría haber cambiado la historia.
Un arranque inesperado para el conjunto dirigido por Sampaoli, que no tuvo ideas suficientes para quebrar el esquema islandés: dos líneas de cinco, mucha concentración y varios hombres rodeando a Messi para no dejarlo jugar.
A los 20 minutos de la primera etapa, no obstante, Agüero abriría el marcador: recibió la pelota en el área, casi de espaldas al arco, se acomodó y sacó un zurdazo que se clavó arriba: 1 a 0. Parecía que comenzaba otro partido y que Argentina estaría más tranquila con la ventaja. Sin embargo, cuatro minutos después, un error de la defensa albiceleste le permitió a Finnbogason igualar el encuentro.
En el segundo tiempo, Sampaoli cambió a Biglia por Banega, para que Messi tuviera mayor acompañamiento y que no necesitara retroceder tanto para hacerse de la pelota. Minutos más tarde, el propio Lío tendría la oportunidad de poner a Argentina nuevamente arriba, pero el arquero islandés se quedó con su disparo desde el punto del penal. Finalmente, con los tardíos ingresos de Pavón e Higuaín, Argentina tuvo un poco más de claridad, pero ya no le quedó tiempo.
Este jueves, la Selección deberá buscar la victoria frente a Croacia, para alcanzar los cuatro puntos y pensar en la posibilidad de clasificarse a octavos.